Save Us (Maxton Hall #3 )(55)



—Realmente tienes que dejar de llamarlo así.

Me quito los zapatos y vuelvo al escritorio. Con cuidado coloco mi teléfono celular contra un vaso vacío.

—Siempre ha sido Graham para ti, pero no para mí—. Me siento extra?a, de repente hablando de él por su nombre.

—Te acostumbrarás—, dice con convicción. Se muerde el labio inferior antes de decidir continuar. —Graham... preguntó si podríamos vivir juntos.

Me congelo con el zapato en la mano y miro la pantalla del teléfono.

—?Y?





Lydia asiente. Una sonrisa aparece en su rostro. —Creo que puedo imaginarlo—, admite en un susurro.

Por el momento, es tan diferente de esa Lydia, a quien encontré en el ba?o del pub de Oxford, llena de lágrimas, que me enternece el corazón.

—Me alegro—, digo honestamente.

—Pero no se lo cuentes a mi hermano por ahora—, agrega rápidamente. —Porque él me colmará de preguntas, de las que no sé la respuesta en este momento.

—Guardaré silencio como una tumba.

—?Cómo está?— pregunta.

Me pongo los zapatos y empiezo a atarlos. Al mismo tiempo, estoy pensando en la respuesta.

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—Probablemente bien. Pero sabes que primero suprime todo en sí mismo, y solo entonces deja que el volcán haga erupción.

Lydia suspira en voz baja.

—Lo conozco de alguna parte. ?Cómo está llevando lo de nuestro padre?

—Cada vez que le pregunto eso, siento que es un tema incómodo para él. Estoy tratando de respetar eso por ahora. Cuento con que se dirija a mí cuando quiera hablar.

La veo asintiendo con la cabeza. De repente, va en serio.

—Si quieres, puedo sacudirlo si no quiere hablar—. Me estoy atando a sus cordones y analizando sus palabras.





—Habló con Wren durante mucho tiempo durante la fogata. Lo importante es que hable con alguien. No tengo que ser necesariamente yo.

—Supongo que no quiere agobiarte más, después de todo lo que sucedió.

—No tengo ni idea—. Me levanto, doy un paso atrás y me doy la vuelta. —?Cómo se ve esto?

—?Grandioso! ?Ember cosió esta falda?— Lydia parpadea un poco.

—?Cómo supiste?— Pregunto y bajo los ojos. El borde de la falda azul marino está forrado con peque?as flores que sólo se pueden ver de cerca.

—No lo sé, tuve esta sensación—. No le creo realmente.

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—?Estás mintiendo! Estoy segura de que te envió una foto.

Lydia sonríe. —Me envía regularmente fotografías de nuevos proyectos. A veces incluso me deja ense?árselas a Ofelia y pedirle su opinión.

—?Quieres saludarla?— Pido y alcanzo mi bolso.

—Me encantaría.

Con el teléfono de James en la mano, voy a la habitación de Ember y llamo a la puerta. Escucho voces silenciosas, y luego mi hermana llama: —?Adelante!

Abro la puerta y me paro en el umbral.

Junto a Ember, justo en el escritorio, se sienta James, mirando su computadora, cuya pantalla puedo ver el logotipo de BellBird.

El me mira.





—?Ember? Alguien quiere saludarte.— Me acerco a ella y le entrego el teléfono celular. Lo toma y sonríe ampliamente a Lydia.

—Le has hecho a Ruby una falda fantástica—, comienza Lydia.

—?La reconociste?

Escucho a Lydia confirmar. Mientras tanto, me vuelvo hacia James y le pongo la mano en la cadera.

—?Que estabas haciendo?

—Ember me mostró su blog—, responde, pero antes de que pueda pedir más, mira su reloj. —Nos vamos.

—?A dónde vas? — Pregunta Lydia.

—Con Wren—, dice James. —Está decorando el alféizar de la ventana.

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Puedo ver por el rabillo del ojo cómo Ember se desvanece de repente después de sus palabras. Abre la boca y dice: —Oh. Eso es genial.

Le devuelvo el teléfono a James. —Gracias—. Ronronea y le dice a Lydia: —Te llamaré ma?ana, ?de acuerdo?

—Por supuesto. Después de la una, tengo mis lecciones antes.

—Es sábado ma?ana—, se?ala con el ce?o fruncido.

—Mi maestra piensa que debería procesar la mayor cantidad de material posible en caso de que los gemelos nacieran antes. Se dice que esto sucede a menudo.

Silbé por lo bajo. —Ahora entiendo lo que quisiste decir con que era estricta.





—Bueno, así es la vida. Diviértete. ?Y saluda a los chicos de mi parte!

—Sí, se?ora—. James sonríe torcido y termina la llamada. Mira hacia Ember. —Gracias por explicarme todo esto. Me has ayudado mucho.

—No hay problema. Mi hermana le asegura. —Diviértanse.

Mira la pantalla, pero creo que realmente está mirando al espacio.

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Kingfitz: Me gustaría verte de nuevo supergirl Kingfitz: ?tal vez café?

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