Garnet Flats (The Edens, #3)(62)

Me quedé boquiabierto. "?Qué? ?Ella te enga?ó?

Foster se rió entre dientes.

"?Por qué es eso divertido?"

Se movió y se puso de pie, extendiendo una mano. "Ven aquí."

Descrucé mis piernas, tomando su mano para ayudarme a levantarme. Pero en lugar de llevarme a algún lugar, como la cocina, que estaba más lejos del pasillo en caso de que Kadence se despertara, me cogió en sus brazos.

"Bailar conmigo." Sus labios rozaron mi frente cuando comenzó a tambalearse. Dos cargos y su pie aterrizó en el mío. "Mierda. Lo siento."

Me reí. "Sigues siendo un bailarín empedernido".

Para un hombre que se movía como un rayo en el ring de boxeo, no podía bailar para salvar su vida.

él sonrió contra mi cabello. “No he tenido mucha práctica”.

"?No bailaste con Vivienne?" La pregunta salió demasiado rápido, antes de que pudiera ocultar la envidia en mi tono. "No importa. No quiero saber.

Tal vez ella no lo había amado. Tal vez él no la había amado. Pero ella había sido su esposa. Y él, su marido.

Nunca he bailado con Vivienne.

Alivió la picadura. Ella había tenido casi todo lo demás, pero al menos esto era mío.

"?De qué hablaste con Kadence hoy?" Pregunté mientras nos hacía bailar en un círculo lento alrededor de la sala de estar.

Que eres mi Dex.

No es exactamente lo mismo si Vivienne se casa con Dex.

él tarareó. Otro zumbido sin explicación a seguir. “Dex y Vivi han estado juntos durante mucho tiempo, pero acaba de conocer a Kadence. No los presentamos hasta después del divorcio. Pero ella sabe que Vivi lo ama. Ella sabe que Vivi y yo siempre la amaremos, incluso si no estamos casados”.

“?El divorcio fue duro para ella?”

"Si y no. Sí, porque significa que hemos tenido muchos cambios. Sí, porque sucedió justo después de la muerte de Arlo, y nos guste o no, él era su abuelo. No, porque la primera vez que vio a Dex besar a Vivienne, Kadence se me acercó y me preguntó por qué nunca había besado a mami así”.

Me incliné hacia atrás para estudiar su rostro. "?No besaste a Vivienne?"

Dejó de moverse, bloqueando sus ojos con los míos. “No en la boca”.

Pero habían estado casados durante siete a?os. ?Cómo fue eso posible? “Esta noche, cuando me besaste en la cocina, Kadence nos vio. Tenía esta mirada en su rostro”.

“Ella lo está juntando”.

Que Vivienne amaba a Dex y por eso lo besó.

Que Foster me amaba.

Kadence estaba conectando los puntos.

“Vivienne es mi amiga”, dijo Foster. "Nada mas. Yo no beso a Vivienne. No estoy enamorado de Vivienne. Y nunca he tenido sexo con Vivienne”.

Esta vez, fui yo quien le pisó el pie. "?Q-qué?"

“No tuvimos un matrimonio, Talia. Tuvimos una sentencia de prisión. Cuando se puso con Dex, no lo vi como una trampa, porque solo ha sido mi compa?era de celda”.

Su compa?ero.

Entonces, si él no hubiera estado con Vivienne, ?entonces quién? ?Cualquiera?

“Te esperé mucho tiempo, amor. Esperaré todo el tiempo que necesites. Eres mía. Y estuvo aquí en Quincy para reclamarme.

“Yo no—” ?Cómo dije esto? “Yo, eh—”

"No me digas". Foster puso su dedo sobre mi boca. “La idea de ti con otro hombre. . . No puedo pensar en eso. No puedo oírlo. Así que no me digas.

No había nada que contar.

Patético, ?verdad? Me había roto el corazón en mil pedazos y todavía no había podido seguir adelante. No había sido capaz de dejarlo ir. En cambio, me concentré en la escuela y el trabajo, bloqueando incluso la idea de alguien nuevo porque en el fondo, nadie sería nunca Foster.

Envolví mi mano alrededor de su mu?eca, alejándola de mis labios. “No ha habido otro hombre”.

Sus ojos se entrecerraron. "?Qué?"

Decirlo de nuevo era demasiado difícil, así que me encogí de hombros.

"Mierda." Las manos de Foster se acercaron a mi rostro, sus dedos se enredaron en mi cabello mientras dejaba caer su frente sobre la mía. Todo su cuerpo se hundió, como si acabara de dejar ir siete a?os de preocupación.

“Di algo,” susurré.

"?Cuanto?"

"?Cuantos que?"

Una de sus manos se soltó de mi cabello, sus dedos rozaron mi mejilla. Las chispas bajo su toque se esparcieron mientras bajaba más y más, sobre mi clavícula y hasta la protuberancia de mi pecho. Luego rozó mis costillas, pasando por mi cadera hasta que rozó mi muslo y movió esos dedos entre mis piernas, presionando lo suficientemente fuerte como para que jadeara.

"Orgasmos".

No estaba seguro de quién se movió primero. Podría haber sido él, capturando mi boca. O podría haber sido yo, echando mis brazos alrededor de sus hombros y trepando por su cuerpo como un maldito árbol.